El liderazgo en la organización hotelera.
Llevo unos días dándole vueltas al concepto de liderazgo, y más concretamente dentro de una organización hotelera. La verdad es que es un tema complejo y que ha sido muy tratado (tanto en lo referente a hoteles como a cualquier tipo de organización empresarial). Hace tiempo que hablaron de ello Julen Iturbe ( y aquí y aquí) o Juan Freire.
La corriente actual parece decir que no son necesarios los líderes, o al menos no como se han entendido tradicionalmente. Dice Julen:
"Primero, creo que es evidente reconocer que hay surgido alternativas "leaderless" que dirían los anglosajones. P2P es una realidad que no usa una centralidad, eBay es un inmenso mercado donde la reputación sustituye al liderazgo, el federalismo propuesto por Charles Handy usa la subsidiariedad para llegar hasta el fondo, la jerarquía en muchos sitios es progresivamente sustituida por la sabiduría... Y, además, ¿no observamos una reticencia cada vez mayor a fiarnos de los líderes?"
"Es tema complejo y con infinidad de aristas, pero cada vez más pienso que las organizaciones sin líderes son el futuro. Porque habrán demostrado que: o ves a cada persona como líder de su vida o, simplemente, no ves líderes, ves personas dignas. Esta es la esencia que veo en la filosofía "de igual a igual". El liderazgo tuvo su época, hasta principios del siglo XXI, pero la sociedad evolucionó y se dio cuenta de que eran todos líderes o el futuro los engulliría."
Tal vez el problema estribe en la definición de "líder". Parece evidente que un líder al estilo tradicional, centralista, acaparador de poder y con una auctoritas adquirida en virtud del puesto es algo desfasado. Las nuevas organizaciones se caracterizan por su distribución en red, donde los centros de poder se difuminan y la centralidad es algo difuso. En este sentido en interesante la afirmación de Alfonso Romay cuando dice:
"Discrepo también en que el líder está asociado al poder. Los líderes NO existen sólo en los niveles altos de una organización. Esto es falso: se pueden encontrar en cualquier nivel."
En realidad parece correcto suponer que el liderazgo es algo natural dentro de una organización, es un elemento que el ser humano necesita para gestionar grupos. Sigue diciendo Romay:
"Admito que hay organizaciones que pueden autogestionarse (incluso en porcentajes cercanos al 100%) pero eso creo que no está reñido con el liderazgo. Alguien debe tomar la decisión última, debe responsabilizarse de los resultados, debe asumir el rol. ¿El grupo? ¿ Conocéis alguna organización lo suficientemente madura como para llevarlo a cabo? Yo no."
A esto indica Juan Freire:
"Comparto los planteamientos de Alfonso Romay. Los líderes tienden a surgir de modo natural en cualquier sistema social y juegan un papel fundamental en su dinámica. Por supuesto diferentes modelos organizativos requieren distintos tipos de líderes y diferentes intensidades de liderazgo. Un líder tradicional, carismático y fuertemente jerárquico, fracasará tratando de gobernar una organización horizontal y distribuida. Pero, este tipo de organizaciones, pensemos en las comunidades de desarrollo de software open source o la misma Wikipedia, cuentan con líderes que hacen que el sistema sea gobernable."
Ahora cabe preguntarse qué liderazgo y cómo influye en la organización hotelera. Como señala Juan Freire, es necesario saber de qué tipo de organización estamos hablando, porque si se trata de una organización centralizada y piramidal, el liderazgo puede ser más un problema que una solución. Todos hemos sufrido a esos jefes que basan su poder en el puesto. Esos no son líderes, pero tienen el poder del liderazgo. no hay que confundir al líder con el jefe.
El líder entiendo que es el resultado de un proceso natural, en el que el sujeto adquiere los galones por sus actitudes y aptitudes, no por un nombramiento externo.
El liderazgo es un medio y no un fin, y en cuanto tal puede ser un bien para la organización, porque canaliza las energías del grupo hacia objetivos comunes. Esto no tiene por qué estar reñido con la autogestión personal, o con ver a las personas de igual a igual que habla Julen.
Las organizaciones verticales que basan el liderazgo en el poder que otorga el nombramiento crean tensiones, pues por lo general no coinciden los "lideres digitales" con los "líderes naturales".
Sin embargo en las organizaciones red la cosa cambia, porque el liderazgo se difumina, se crean diversos focos de poder (por llamarlos de algún modo). Es cierto que en este tipo de organizaciones puede continuar el nombramiento a dedo del líder, pero su poder fáctico suele ser más limitado. Como decía Romay, los líderes no están sólo en las esferas altas del poder.
En realidad sería interesante transmitir la sensación de liderazgo a todos los miembros de la organización. Si estamos hablando de libertad y responsabilidad es fundamental hacer comprender al trabajador que en el momento de la verdad él es el líder, y la gestión y las decisiones corren a su cargo.
De todos modos el líder actual ha de ser consciente que liderazgo no es sinónimo de poder, sino más bien de inspiración. Poner todo el peso de la organización en los hombros de una persona es un error puesto que desaprovecha toda la inteligencia colectiva de la organización. El líder autoritario no es igual que el líder con auctoritas, ésta es concedida por los otros miembros de la organización, y puede ser retirada en cualquier momento.
Ser líder no es un estado permanente, posiblemente no sea siquiera un estado, sino un proceso diario que hay que alimentar y desarrollar, puesto que depende de la voluntad de los "liderados".
En la actualidad, los hoteles suelen tener demasiados "líderes digitales" y con demasiada autoridad. Como dice Juan Freire, en un mundo como el actual, donde la colaboración, tanto interna como externa, y la innovación son fundamentales en las organizaciones empresariales, parece que tipo de líder tradicional deja de tener sentido. En el nuevo líder el fracaso, la colaboración y la inspiración son conceptos habituales y adquieren nuevos sentidos palabras como "competitividad" o "empresa".
Sería interesante empezar a andar el camino en las organizaciones hoteleras.
La corriente actual parece decir que no son necesarios los líderes, o al menos no como se han entendido tradicionalmente. Dice Julen:
"Primero, creo que es evidente reconocer que hay surgido alternativas "leaderless" que dirían los anglosajones. P2P es una realidad que no usa una centralidad, eBay es un inmenso mercado donde la reputación sustituye al liderazgo, el federalismo propuesto por Charles Handy usa la subsidiariedad para llegar hasta el fondo, la jerarquía en muchos sitios es progresivamente sustituida por la sabiduría... Y, además, ¿no observamos una reticencia cada vez mayor a fiarnos de los líderes?"
"Es tema complejo y con infinidad de aristas, pero cada vez más pienso que las organizaciones sin líderes son el futuro. Porque habrán demostrado que: o ves a cada persona como líder de su vida o, simplemente, no ves líderes, ves personas dignas. Esta es la esencia que veo en la filosofía "de igual a igual". El liderazgo tuvo su época, hasta principios del siglo XXI, pero la sociedad evolucionó y se dio cuenta de que eran todos líderes o el futuro los engulliría."
Tal vez el problema estribe en la definición de "líder". Parece evidente que un líder al estilo tradicional, centralista, acaparador de poder y con una auctoritas adquirida en virtud del puesto es algo desfasado. Las nuevas organizaciones se caracterizan por su distribución en red, donde los centros de poder se difuminan y la centralidad es algo difuso. En este sentido en interesante la afirmación de Alfonso Romay cuando dice:
"Discrepo también en que el líder está asociado al poder. Los líderes NO existen sólo en los niveles altos de una organización. Esto es falso: se pueden encontrar en cualquier nivel."
En realidad parece correcto suponer que el liderazgo es algo natural dentro de una organización, es un elemento que el ser humano necesita para gestionar grupos. Sigue diciendo Romay:
"Admito que hay organizaciones que pueden autogestionarse (incluso en porcentajes cercanos al 100%) pero eso creo que no está reñido con el liderazgo. Alguien debe tomar la decisión última, debe responsabilizarse de los resultados, debe asumir el rol. ¿El grupo? ¿ Conocéis alguna organización lo suficientemente madura como para llevarlo a cabo? Yo no."
A esto indica Juan Freire:
"Comparto los planteamientos de Alfonso Romay. Los líderes tienden a surgir de modo natural en cualquier sistema social y juegan un papel fundamental en su dinámica. Por supuesto diferentes modelos organizativos requieren distintos tipos de líderes y diferentes intensidades de liderazgo. Un líder tradicional, carismático y fuertemente jerárquico, fracasará tratando de gobernar una organización horizontal y distribuida. Pero, este tipo de organizaciones, pensemos en las comunidades de desarrollo de software open source o la misma Wikipedia, cuentan con líderes que hacen que el sistema sea gobernable."
Ahora cabe preguntarse qué liderazgo y cómo influye en la organización hotelera. Como señala Juan Freire, es necesario saber de qué tipo de organización estamos hablando, porque si se trata de una organización centralizada y piramidal, el liderazgo puede ser más un problema que una solución. Todos hemos sufrido a esos jefes que basan su poder en el puesto. Esos no son líderes, pero tienen el poder del liderazgo. no hay que confundir al líder con el jefe.
El líder entiendo que es el resultado de un proceso natural, en el que el sujeto adquiere los galones por sus actitudes y aptitudes, no por un nombramiento externo.
El liderazgo es un medio y no un fin, y en cuanto tal puede ser un bien para la organización, porque canaliza las energías del grupo hacia objetivos comunes. Esto no tiene por qué estar reñido con la autogestión personal, o con ver a las personas de igual a igual que habla Julen.
Las organizaciones verticales que basan el liderazgo en el poder que otorga el nombramiento crean tensiones, pues por lo general no coinciden los "lideres digitales" con los "líderes naturales".
Sin embargo en las organizaciones red la cosa cambia, porque el liderazgo se difumina, se crean diversos focos de poder (por llamarlos de algún modo). Es cierto que en este tipo de organizaciones puede continuar el nombramiento a dedo del líder, pero su poder fáctico suele ser más limitado. Como decía Romay, los líderes no están sólo en las esferas altas del poder.
En realidad sería interesante transmitir la sensación de liderazgo a todos los miembros de la organización. Si estamos hablando de libertad y responsabilidad es fundamental hacer comprender al trabajador que en el momento de la verdad él es el líder, y la gestión y las decisiones corren a su cargo.
De todos modos el líder actual ha de ser consciente que liderazgo no es sinónimo de poder, sino más bien de inspiración. Poner todo el peso de la organización en los hombros de una persona es un error puesto que desaprovecha toda la inteligencia colectiva de la organización. El líder autoritario no es igual que el líder con auctoritas, ésta es concedida por los otros miembros de la organización, y puede ser retirada en cualquier momento.
Ser líder no es un estado permanente, posiblemente no sea siquiera un estado, sino un proceso diario que hay que alimentar y desarrollar, puesto que depende de la voluntad de los "liderados".
En la actualidad, los hoteles suelen tener demasiados "líderes digitales" y con demasiada autoridad. Como dice Juan Freire, en un mundo como el actual, donde la colaboración, tanto interna como externa, y la innovación son fundamentales en las organizaciones empresariales, parece que tipo de líder tradicional deja de tener sentido. En el nuevo líder el fracaso, la colaboración y la inspiración son conceptos habituales y adquieren nuevos sentidos palabras como "competitividad" o "empresa".
Sería interesante empezar a andar el camino en las organizaciones hoteleras.
Etiquetas: liderazgo
5 comentarios:
Creo que el liderazgo esta sufriendo la misma mutación que los mercados: la supersegmentación. El liderazgo no debe entenderse en terminos absolutos (algunos autores lo asociacian a conceptos como el mesianismo)sino en ralaciópn a algo: situaciones, tematicas, necesidades.
No cre en el lider, sino el el presciptor/experto, en función a la resolución de determinadas situaciones/necesidades.
Juan, no dudo que llegaremos a una sociedad sin líderes, al menos de la forma que se define a un líder en nuestros días.
Eso lo iremos viendo en la medida que las organizaciones avancen en la participación y vaya también reduciéndose el papel e influencia de los Estados.
Una excelente reflexión que a muchos hará pensar, pero creo que aún estamos lejos de eso y que siguen siendo los líderes la guía fundamental en las organizaciones. Su papel se ha enriquecido por una parte y por otra, da pasos al conocimiento, participación y aporte de todos. Aún continua siendo el aglutinador y facilitador de toda esta revolución del conocimiento.
Saludos,
Luis Simpson
Luis, en realidad pienso que siempre van a ser necesario los líderes, lo que postulo es un cambio de naturaleza: de un lider que basa su poder en el puesto a uno que basa su poder en el convencimiento del grupo, o en la ausencia de poder, que es otro modo de verlo.
Tal vez la mejor definición de un líder turístico sea la figura de un entrenador de fútbol....Si el equipo funciona el se lleva la gloria pero cada integrante del equipo es la estrella en su función dentro del colectivo: delanteros , defensas, centrocampistas, .....
A mí me gusta mucho el enfoque de Meredith Belbin acerca de los roles. Me gusta porque asume que somos personas con diferentes potencialidades y que la fuerza viene de la adecuada complementariedad de roles, o sea, de personas.
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